Si hay algo difícil de encontrar hoy día en un piso es un baño grande. Y aunque tengas la suerte de tener uno de esos baños en los que caben dos personas, quizá tengas también un aseo que desafía las medidas humanas.
Con este post intentaré daros ideas para convertir un cubículo en un lugar con almacenaje y a la vez con detalles que lo llenen de personalidad.
Para empezar a decorar tu aseo yo recomiendo hacer un pequeño inventario de las cosas que realmente necistas guardar en él. Dependerá de esto la cantidad de almacenaje que pongas. No hace falta poner de más y, por supuesto, no pongas de menos. Os enseñaré lo que elegí yo en otro post. Hoy me centraré más en los detalles pequeños.
Elegí los colores que llevaría mi aseo comprando esta alfombra de baño con azul, beige y marrón. Los colores, el grosor y la textura ayudan a dar calidez a la habitación, además de delimitar la zona del lavabo, ya que no tengo mueble debajo (es una de mis tareas pendientes).
Pon toallas que vayan a juego con otras cosas del baño. Te convertirás en pro de la decoración cuando el cepillo de dientes, el jabón y la esponja, también vayan a juego. Pruébalo! Es un truco fácil y barato.
Si, como yo, no tienes espacio ni para posar el jabón, utiliza una jabonera de pared, es muy práctico y le da un toque diferente.
Uno de los puntos fuertes de un baño es el espejo. Yo le dí más personalidad al baño con uno que lleva reloj arriba y unos ganchos abajo. Ambas cosas son útiles y llamativas. Aprovechando el toque industrial que le da el reloj, lo completé con un foco metálico y una percha con colores similares.
Que no te asuste mezclar estilos e innovar!
Alfombra de baño (Zalando Home, 7,95 €); espejo con reloj y colgantes (Westwing Home&Living, 25 €); jabonera de pared (Westwing Home&Living, 8 €); foco de pared (Ikea, 15,99 €).
Más ideas para ahorrar espacio? Me vendrá muy bien leerlas aquí o en las redes sociales.