Los salones alargados son la pesadilla de la decoración para muchos, pero no siempre tiene por qué ser así. Este tipo de salón nos ofrece muchas ventajas en comparación con los rectangulares o cuadrados habituales, por ejemplo, que puedes utilizar un sofá de más plazas. Además, si afrontas de manera adecuada el desafío, conseguirás un lugar muy acogedor y la estancia no parecerá tan estrecha. Te explicamos lo que tienes que hacer para conseguir decorar un salón alargado si sigues leyendo.
La elección del sofá, el mueble rey del salón
Cuando hablamos de muebles y objetos de decoración en un salón, el primero en el que pensamos es el sofá. Y no es para menos, ya que es el que más espacio ocupa y en el que pasaremos una gran parte del tiempo. Cuando queramos relajarnos, desconectar o simplemente pasar un rato viendo la televisión o conviviendo con nuestra familia, este mueble estará presente. Es por ello que el sofá es el mueble rey del salón y el alma de este espacio.
En este sentido, tener un salón alargado nos ofrece la ventaja de poder utilizar un sofá mucho más largo en comparación con un salón cuadrado. En tiendas como Sofá Center Valencia puedes encontrar varios tipos de estilo chaise longue, tresillos e incluso sofás a medida adaptados a tus necesidades o a las de tu familia. De esta forma sacarás el mayor provecho al espacio y tendrás un sofá a la medida que necesites aunque tu salón sea más largo de lo habitual.
La distancia entre el sofá y los objetos de enfrente
Si ya tienes sofá o acabas de instalarlo, otra de las cosas que hay que tener siempre en cuenta es la distancia mínima que debe haber entre este mueble y los de enfrente, para que no resulten molestos al pasar. Como mínimo debemos dejar unos 40 cm para respetar las zonas de paso. Por supuesto, en este tipo de salones, al instalar tu sofá apóyalo contra la pared. No es necesario que lo coloques en una esquina, así podrás dejar un hueco para una mesita con un flexo, algún adorno y algo tan práctico como el mando de la tele.
Colores claros para mayor amplitud
Los salones alargados no son buenos para innovar con colores llamativos o papeles pintados, aunque todo depende de las posibilidades de cada espacio. La recomendación general para este tipo de zonas de la vivienda es que aproveches para pintar las paredes con colores claros. Esto te ayudará a ganar en luminosidad y en la sensación de amplitud. Con este mismo fin, asegúrate de que entra toda la luz que tiene que entrar por la ventana, evita poner objetos o muebles innecesarios en medio para poder aprovecharla al máximo. Es recomendable también que instales una cortina ligera para poder tapar la luz del sol cuando te sientes a ver la televisión y así no se generen reflejos en la pantalla.
Muebles bajos y poco recargados
El problema de los salones alargados es que, a la mínima que instalamos un mueble u objeto de decoración, tenemos la sensación de que éste se ha comido el espacio, lo que puede crear sensación de agobio. Sin embargo, hay muebles que sí o sí queremos tener en él porque son funcionales. En este caso, es buena idea que utilices muebles bajos, intentando que no sobrepasen la altura de 1,20 metros. Estas piezas bajas harán que la pared se vea más despejada y que la altura hasta el techo sea mayor visualmente hablando. De esta forma dará la sensación de que las dimensiones de la vivienda son mayores.
Primero la zona de relax y luego el comedor
Si tu salón alargado también es comedor, una buena forma de distribuirlo es colocando primero el sofá y después la mesa y las sillas. Así, reducirás la sensación de que tus muebles se han comido todo el espacio disponible. Además, por lo general, los salones alargados suelen tener la ventana al fondo del mismo. Si colocas una mesa junto a ella, podrás aprovechar la luz del sol para comer sin necesidad de tener que hacer un gasto innecesario de electricidad. También podrás mirar hacia el exterior mientras comes, lo cual te ayudará a distraerte y a hacerlo con más calma.
Saca partido a las esquinas de tu salón alargado
Siempre que puedas, aprovecha las esquinas para decorar tu salón. Lo decíamos más arriba y lo volvemos a repetir, puedes utilizar las esquinas para colocar una mesita con flexo o simplemente instalar una lámpara de pie. También se puede sacar partido al espacio colocando un jarrón con una planta alta natural, como la palma kentia o la palmera de bambú. ¡Para gustos plantas!
No te excedas con la decoración
Personalizar un salón o cualquier espacio de la vivienda no es cuestión de cantidad, sino de calidad. No se trata de excederse con la decoración y colocar todo aquello que nos interesa o que vamos comprando a lo largo del tiempo. Es importante ser consciente del espacio del que se dispone y aprovechar los muebles que tenemos para ello. Los excesos harán que se vea abarrotado y que parezca más pequeño de lo que es, además de poco cuidado y menos estético. Por ello, deshazte de los muebles que no necesitas o colócalos en otro lugar. Un salón alargado y estrecho es un lugar estupendo para implementar un estilo minimalista y funcional como lo son el japandi o el moderno.
¿Cómo debe ser la mesa de centro?
La mesa de centro es algo que no debe faltar en un salón, sobre todo si eres de las personas que disfruta del picoteo en el sofá. Para que una mesa de centro en un salón alargado no aporte una sensación de agobio, se puede optar por superficies transparentes como el cristal o el metacrilato. Al ser transparente la sensación que genera es muy diferente en comparación con una mesa opaca o una mesa de colores oscuros.
La mesa de centro es de gran utilidad para colocar el mando de la tele, para guardar las revistas en la repisa, para colocar nuestras bebidas o para poner nuestro bol de palomitas mientras estamos viendo nuestra serie preferida, así que piensa en tus necesidades antes de decidirte por una. Acuérdate siempre de respetar la distancia de paso para que ésta no moleste. En el caso de que no puedas cumplir con esta regla, será mejor evitarla y optar por otra fórmula, como una mesita al lado del sofá.
ohh m encanta la deco de la ultima foto